Toda vez que se juega es especial. En el ámbito de la UROBA, Copa Cervantina, amistoso (incluso si se habilitara la posibilidad de tenerlo en videojuego). El clásico Remo – Azul Rugby se mantiene como una de las rivales más representativas del rugby en el centro de la provincia, y el sábado pasado ofreció una versión que conmovió a todos los presentes a la vera del arroyo. Y no sólo se trató de un notorio clásico en la Primera División: todo el bloque de encuentros (infantiles, juveniles e Intermedia) dio forma a una jornada festiva con el espíritu de la guinda.
La tercera fecha de la Zona 1 del Torneo Super 8 organizado por la Unión de Rugby del Oeste de Buenos Aires, uno de sus epicentros, tuvo lugar en la cancha de avenida Pellegrini. En la máxima categoría, como desde hace dos años aproximadamente viene sucediendo en el contexto competitivo de la Unión, Remo ganó el cotejo; fue 19 a 12 en un partido que supo convidar con intrigas y emociones fuertes hasta el instante final.
De nuevo en EL TIEMPO, la mirada del clásico -en Primera- desde cada color, desde cada sentimiento por un club. Francisco Tourne ofrece la crónica desde la emoción remera, Ricardo Albarrán cuenta el clásico entre las palpitaciones borrajas.
Remo aprovechó sus buenos momentos
Por Francisco Tourne
Numeroso público se acercó a presenciar desde hora temprana una nueva edición del clásico del rugby azuleño. Una extensa jornada que tuvo, a partir de las 15.45, el encuentro de Primera División. Ambos salieron a imponer su juego, con gran dinámica en sus movimientos.
La apertura del marcador llegó a poco de iniciado, con un Azul Rugby volcado en ofensiva: la pelota es interceptada por el centro de la cancha por el segunda línea remero Matías Torchia, quien corrió más de 50 metros para apoyar el primer try debajo de la hache. 7 a 0.
En desventaja, Azul Rugby continuó en ofensiva, en tanto Remo respondía. Otra vez Torchia (la figura del encuentro) interceptó el ataque rival y volvió a marcar. 12 a 0.
El clásico se signaba por la paridad, con mucha fricción, jugado con alta intensidad. No se sacaban diferencias, en las formaciones fijas o móviles.
Azul Rugby no se resignaba; con mucho actitud iba en busca de achicar la diferencia, lo cual logró a la media hora de juego: balón rechazado por el full back remero, Felipe Perdomo entra en acción en sus 22 yardas, veloz carrera, dos marcas en el camino, pase a Gonzalo Giggi y try para achicar la cifra a 7-12.
El segundo tiempo encontró a Remo presionando sobre el campo de Azul Rugby. Ante esto, la borraja contragolpeaba a través de sus tres cuartos. En el minuto 8 Remo perdió temporalmente a un jugador (tackle peligroso), coyuntura que bien aprovechó el equipo del sur. Line de ataque, continuado de forwards y finalmente su tercera línea Gonzalo Marateo es el que anota, dejando el partido empatado en 12 puntos.
Remo sintió el impacto, asimiló el golpe y fue por un nuevo desequilibrio en el resultado. Lo pudo hacer promediando la etapa, a través de Ezequiel Agosti, quien desprendiéndose de un ruck cerca del in-goal anotó para el local, dejando el score 19-12.
El clásico sostuvo su dinámica, el fervor del ida y vuelta; ambos intentaban, cada pelota parecía la última y el resultado era incierto.
Azul Rugby acorraló a Remo en el cierre, lo puso dentro de sus 22 yardas. El local se multiplica en labores defensivas, la ofensiva de la visita persistía, llegando a quedar en algunos intentos a centímetros del in-goal , dándole un tinte dramático al cotejo. Con el tiempo cumplido, el árbitro olavarriense Gabriel Pannarace -de muy buena labor- dio por finalizado el partido.
Faltó encontrarle la vuelta en el final
Por Ricardo Albarrán.
Embalado llegó Azul a tierras remeras, con la ilusión de comenzar a trepar en la tabla de la Uroba. En lo anímico, motivado por el último cruce entre ambos: la visita quería demostrar que el rugby está volviendo de a poco a Urioste.
Juego de manos rápido, entradas firmes y seguras en los rucks, y gordos potentes en los ataques mostraron los primeros 5 minutos. Sí, sólo 5. La guinda viajó de los gordos a los flacos y queriendo hacer un salteo largo, “El Cache” (jugador remero) la cazó en el aire y corrió para meterse entre la H. Luego Remo convirtió y 7 a 0. Cosas que tiene el rugby, el que menos se equivoca gana.
Otra vez Azul al ataque, los gordos como siempre cuchillo entre los dientes, lanzados al ataque. La guinda que viaja a la línea y de ahí a los gordos, otra vez, salteo. Otra vez “El Cache”, otra vez try, esta vez afuera. 12 a 0.
Quince minutos de un primer tiempo que era una desazón. Azul jugaba bien un partido duro, Remo se defendía y era prolijo, sin errores y rápido en el ataque. Felipe Perdomo generó un buen ataque contra la línea, se la colgó a Giggi y este corrió pegadito a ésta para anotar un muy buen try que convertiría, bajo una lluvia de silbidos, Mazzo. 12 a 7 y el partido que parecía enderezarse a poco de que terminara el primer tiempo.
El segundo tiempo, la Borraja lo arrancaba con viento y resultado en contra. Los gordos, otra vez lanza en mano al ataque. Galotti daba juego y Garat-Goicolea-Scalcini daban puntadas; Hait de un gran partido, no sólo daba fuerza en ataque, sino que se esforzaba por defender más de lo normal. Rápido Coronel de mente y cuerpo se sumaba. y así, todos juntos iban para adelante para tratar de torcer la historia.
Del fondo otra vez Perdomo se animó. Coronel pisó y la colgó, y en ese cuelgue apareció Marateo, con una mano (resultó que la otra tenía una fractura), pisó para la derecha y pasó uno, pisó para la izquierda y pasó otro, encaró y pasó, y anotó. Paridad en 12 y la locura en las tribunas visitantes.
ARC había mejorado. Una amarilla a Remo lo metía más en su campo, y las chances se acrecentaban, incluso ante la inquebrantable defensa local y los constantes errores de manejo de la guinda en la visita.
Pero otra vez la tormenta llegó. Un scrum que logra avanzar, la guinda que sale, una defensa dormida y try de Remo adentro, para el 19 a 12. Volver a empezar.
Azul buscó durante los últimos quince, incansablemente, el try que lo pusiera otra vez en pardas. Dos veces estuvimos ahí, pero la pelota quedó suspendida o antes de la línea del Ingoal. Otras tantas veces atacamos en busca de penetrar, pero una tras otra vez los ataques terminaban en penales o salidas con el pie del local.
19 a 12. Y a esperar a Onas en casa el sábado que viene.
EL DATO
Los resultados de los otros clásicos:
M14: Remo 25 – Azul Rugby 5 / M15: Remo 84 – Azul Rugby 0 / M16: Remo 17 – Azul Rugby 18 / M18: Remo 38 – Azul Rugby 3 / Intermedia: Remo 43 – Azul Rugby 0.